Consejos esenciales y básicos para el cultivo de cactus del género Rhipsalis en el jardín. Fotografía de un representante del género.
Características generales de los cactus del género Rhipsalis
Rhipsalis es un pequeño género de plantas suculentas (generalmente epífitas) perteneciente a la familia Cactaceae originario de zonas tropicales de América; solo la especie Rhipsalis baccifera está presente en África y parte de Asia. Son cactus generalmente de pequeño porte o arbustivos que desarrollan tallos colgantes de pequeño grosor. Existen especies con tallos divididos en costillas, cilíndricos o aplanados. Las areolas en este género son diminutas y desarrollan espinas muy pequeñas y suaves; a veces no se desarrollan. A diferencia de la mayoría de las cactáceas, estos cactus prefieren desarrollarse en zonas algo sombrías y con una humedad bastante elevada; se utilizan frecuentemente para adornar interiores iluminados. Las flores no son muy atractivas en este género ya que son generalmente pequeñas y poco coloridas; aun así, se producen en abundancia en los tallos.
Vista de pequeños cactus del género Rhipsalis en macetas
Consejos básicos para el cultivo de cactus del género Rhipsalis
Iluminación:
Es de suma importancia cultivar estos cactus en zonas iluminadas, pero donde no reciban nunca la luz solar directa. El sol provoca quemaduras en los tallos y deshidrata a las plantas con rapidez. Son cactus ideales para el interior de los hogares si se cuentan con fuentes de iluminación artificial bastante fuertes (bombillos LED son muy efectivos). Un lugar ideal para estas plantas es bajo la luz solar filtrada por grandes árboles o mallas de sombreado.
Temperatura:
Prefieren crecer en climas donde predominen temperaturas frescas o ligeramente cálidas. El rango ideal para la mayoría de las especies se encuentra entre los 18ºC-26ºC. No exponerlas nunca a temperaturas inferiores a los 8ºC ya que se pudren con facilidad.
Sustrato:
Para lograr un crecimiento eficiente en este grupo vegetal se requiere utilizar un sustrato rico en nutrientes y con un pH neutro. Elaborar una mezcla basada en 1/3 ce corteza de pino, 1/3 de humus de lombriz y 1/3 de gravilla o arena. También se pueden incorporar al sustrato fragmentos de barro cocido y carbón vegetal.
Frecuencia de riego y humedad:
Necesitan de más riegos que la mayoría de los cactus ya que precisan un sustrato siempre húmedo, pero nunca encharcado. Un riego o dos a la semana es suficiente para estas plantas. En invierno el riego debe ser más espaciado para evitar posibles podredumbres por frío. La humedad ambiental debe ser superior al 70% durante todo el año. Utilizar preferiblemente agua de lluvia ya que la del grifo es rica en minerales y pueden variar el pH del sustrato.
Plagas y enfermedades:
Debido a la elevada humedad en la que crecen de forma natural son muy susceptibles al ataque de cochinillas. En épocas de mucho calor cuando el ambiente es más seco pueden sufrir infestaciones de arañas rojas (ácaros). Los hongos aparecen generalmente cuando están presentes las plagas mencionadas anteriormente.
Multiplicación:
Se multiplican muy fácil a partir de esquejes de tallos que enraízan con mucha facilidad. El esquejado preferiblemente realizarlo en estaciones frescas o cálidas ya que el calor incentiva la formación de raíces.
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Genial y muy interesante el artículo, muy ckara la explicación. Muchas gracias.
Clara*