Aprende a cuidar cactus del género Turbinicarpus

Consejos básicos para el cultivo de cactus pertenecientes al género Turbinicarpus. Fotografías de algunos representantes del género.

Características generales de los cactus del género Turbinicarpus

Turbinicarpus es un pequeño género de la familia Cactaceae originario de hábitats rocosos de México. Son cactus generalmente de pequeño porte que no logran superar los 12 cm de altura. El género cuenta con +/- 22 especies de las cuáles más de la mitad se encuentran en grave peligro de extinción. Además, existen numerosos híbridos naturales y obtenidos por el hombre que han provocado numerosas confusiones en las identificaciones. Los cactus de este género solo son comercializados por viveros con certificados de producción propia (desde sus propias semillas) ya que son plantas protegidas.

Vista de un ejemplar de cactus del género Turbinicarpus en floración

Vista de un ejemplar de cactus del género Turbinicarpus en floración



 

La mayoría de las especies de este género desarrollan un sistema radical grueso (más grande en ocasiones que los tallos) que les permite fijarse al sustrato. El sustrato sobre el que crecen estas plantas es muy rocoso y alcalino debido a la presencia común de piedras calizas o similares. En algunas especies el crecimiento se observa entre rocas donde existe muy poco sustrato. Son plantas que toleran hábitats muy extremos en comparación con la mayoría de las especies vegetales.

Tallos

Los tallos crecen muy lento en este género y son generalmente globosos a cilíndricos con numerosos tubérculos en cuyos ápices se disponen espinas mayormente curvas. La formación de hijuelos es rara en las especies, en algunas es necesario esperar años para que comiencen a formarlos. Las espinas protegen a estas plantas de los depredadores evitando que sean devoradas. El número de espinas es muy variable por areola en dependencia de la especie o híbrido.

Flores

Las flores siempre aparecen en el ápice de los tallos y son, por lo general, bastante atractivas, aunque un poco pequeñas. Muestran diversos colores en dependencia de la especie o híbrido. En muchas especies los segmentos de la corola presentan líneas verticales más oscuras muy conspicuas. Hay especies que requieren de más de 3 años para florecer por primera vez debido a que el crecimiento es extremadamente lento.

 


Otro ejemplar de cactus del género Turbinicarpus en floración

Otro ejemplar de cactus del género Turbinicarpus en floración

Consejos para el cultivo de los cactus del género Turbinicarpus

Los cactus de este género son generalmente difíciles de cultivar debido a que muchas especies son difíciles de mantener en sus propias raíces. A continuación, los requerimientos de cultivo básicos para la mayoría de las especies e híbridos:

Iluminación:

Este grupo de cactus requieren una exposición muy soleada durante todo el año. El cultivo en interior puede provocar el detenimiento total del crecimiento.

 


Temperaturas:

Mientras predominen altas temperaturas mejor se desarrollarán estos cactus. No toleran la exposición prolongada a temperaturas inferiores a los 0ºC y mucho menos el contacto con la escarcha. El rango óptimo para la mayoría de las especies se encuentra entre los 24ºC-30ºC.

Sustrato:

Es muy importante que el sustrato a utilizar posea un óptimo drenaje y aireación. En algunas especies el sistema radical es bastante delicado siendo necesario el injerto sobre cactáceas más resistentes. Nunca utilizar sustratos ácidos ya que el crecimiento se detendrá completamente.

Frecuencia de riego:

Son cactus muy bien adaptados a sobrevivir largas temporadas de sequía siendo innecesario un riego frecuente. Se recomienda regar una vez cada 10-12 días durante las estaciones cálidas y cada 18-20 días durante las más frescas. Si se injertan toleran riegos más frecuentes y disminuye considerablemente el riesgo de pudrición.

Plagas y enfermedades:

Son raramente afectados por plagas, aunque pueden ser invadidos por cochinillas. Los moluscos devoran secciones de raíces y tallos si logran alcanzarlos. Los hongos atacan principalmente las gruesas raíces si la humedad del sustrato es muy alta.

 


Multiplicación:

Principalmente a partir de semillas. Los hijuelos enraízan con mucha dificultad siendo necesario el injerto en la mayoría de las veces.

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