Manual básico para el cultivo de orquídeas del género Zygopetalum. Descripción general de las especies de este popular género de plantas.
Características de las orquídeas del género Zygopetalum
Zygopetalum es un pequeño género de plantas de +/- 18 especies descritas perteneciente a la familia Orchidaceae. Son originarias de zonas húmedas y boscosas de Sudamérica, pero sus valores ornamentales han propiciado su cultivo en todo el mundo. Existen tanto especies terrestres como epífitas siendo necesario conocer previamente los requerimientos de sustrato de la planta a cultivar. Este género es muy apreciado por su rápido crecimiento y vistosas flores.
Flores de una orquídea del género Zygopetalum
Hojas
Todas las especies desarrollan grandes pseudobulbos en cuyos extremos se disponen las hojas. En este género generalmente son dos. Las hojas son de gran tamaño +/- 40 cm de largo, poseen una coloración verde brillante, nerviación conspicua y una forma elíptica-redondeada. Cada hoja puede mantenerse sin caer del pseudobulbo por más de un año.
Flores
Las flores aparecen generalmente durante el invierno o finales del otoño. Estas se disponen en inflorescencias que surgen de la base de los pseudobulbos y las cuales pueden sostener más de 8 flores. Cada flor se caracteriza por tener +/- 6 cm de diámetro, poseer los sépalos y pétalos lanceolados y con tallas muy similares y un labelo muy prominente y lobulado. Los pétalos y sépalos generalmente con numerosas manchas de gran valor ornamental y están dispuestos horizontalmente y hacia arriba (solo el labelo dispuesto hacia abajo). El labelo también muy colorido. El color predominante en las flores de este género es el morado. Además, todas las flores poseen un aroma muy agradable.
Consejos para el cultivo de las orquídeas del género Zygopetalum
Este género de orquídeas es muy fácil de mantener en el jardín si se tienen en cuenta los siguientes requerimientos de cultivo:
Iluminación:
Es importante que estas plantas no reciban la luz solar directa porque pueden sufrir quemaduras. Se desarrollan mejor bajo mallas de sombreado o bajo la luz solar filtrada por grandes árboles.
Temperatura:
Prefieren crecer en climas generalmente frescos o algo fríos. El rango óptimo para la mayoría de las especies se encuentra entre los 15ºC-24ºC. No toleran temperaturas superiores a los 32ºC ni inferiores a los 2ºC.
Sustrato:
Para las especies epífitas se recomienda una mezcla de carbón vegetal, mantillo de hojas, trozos de barro cocido, poliestireno expandido y cortezas de pino. Las especies terrestres requieren un sustrato basado en turba, arena gruesa y corteza de pino para un mejor crecimiento.
Humedad relativa:
Prefieren un ambiente algo seco +/- 50% y por esto no deben pulverizarse con regularidad.
Frecuencia de riego:
Regar una vez cada semana con agua de lluvia previamente calentada (tibia) para evitar daños en las raíces si el agua está muy fría. El agua del grifo puede alterar el pH del sustrato y aumentar las concentraciones de sales en el sustrato que afectarán a estas plantas en el futuro. El riego siempre debe ser aplicado a la altura del sustrato evitando humedecer las hojas para impedir ataques fúngicos y pudriciones.
Plagas y enfermedades:
Afectadas con frecuencia por arañas rojas durante la época de seca y por cochinillas, áfidos y moluscos durante la temporada de lluvia. Diferentes hongos patógenos afectan a este grupo de orquídeas.
Multiplicación:
Muy sencilla por división de las plantas cuando adquieren un buen tamaño. Tener cuidado no dañar mucho el sistema radical durante este proceso para evitar pudriciones futuras.
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