Fotografía y características generales de la planta suculenta Duvaliandra dioscoridis. Consejos esenciales para su cultivo.
Descripción de la planta suculenta Duvaliandra dioscoridis
Duvaliandra dioscoridis es una planta suculenta, herbácea y perenne perteneciente a la subtribu Stapeliinae de la familia Apocynaceae. Esta planta es la única representante del género (género monotípico) y actualmente se encuentra en grave peligro de extinción. Es solamente originaria de una isla perteneciente a la República Democrática Popular del Yemen llamada Socotora o Socotra. Actualmente se encuentra presente en colecciones de todo el mundo siendo importante para una repoblación futura de su hábitat natural.
Tallos y hojas
Esta especie desarrolla tallos carnosos de +/- 8 cm de largo y +/- 1 cm de diámetro que ramifican muy poco (crecimiento lento). Dichos tallos presentan 4 ángulos bien definidos en cuyos márgenes se observan dientes poco pronunciados que sostienen hojas muy reducidas poco apreciables a la vista. Los tallos muestran una coloración verde grisácea opaca muy conspicua o algo rojiza si reciben mucho sol. Las ramificaciones siempre axilares con la formación de nuevos tallos principalmente de las axilas bajas. Además, cuando los tallos sufren alguna herida, expulsan un látex incoloro que facilita la cicatrización de las heridas.
Flores
Las flores se disponen en pequeñas inflorescencias extraaxilares que aparecen en zonas bajas de los tallos en crecimiento. Cada inflorescencia desarrolla de 1-5 flores de forma sucesiva. Todas las flores se caracterizan por ser sostenidas por un pedicelo glabro y amarillento-rojizo de +/- 1.5 cm de largo que termina en 5 sépalos triangulares cortos de igual coloración.
La corola floral primeramente soldada y terminada en 5 segmentos triangulares que le dan un aspecto estrellado. La coloración de dichos segmentos es rojiza opaca o anaranjada; la garganta floral es blanquecina. En la superficie de los segmentos se pueden observar pelos rojizos, pero en pocas cantidades. El tamaño de las flores totalmente abiertas puede superar los 3 cm de diámetro, es decir, son medianas comparadas con las que poseen otros géneros de la subtribu.
En el centro de las flores se observa el polinarium con las coronas externas e internas del ginostegio soldadas en sus extremos más distantes. Estas coronas muestran una conspicua coloración rojiza. En esta especie las flores expelan un olor desagradable a putrefacción que permite atraer a insectos que participan en su polinización.
Consejos para el cultivo de la planta suculenta Duvaliandra dioscoridis
Duvaliandra dioscoridis es fácil de cultivar si se tienen en cuenta los siguientes consejos para su cultivo:
Iluminación:
Es muy importante que esta planta reciba al menos el sol directo de primeras horas de la mañana o finales de la tarde. En climas muy cálidos debe protegerse del sol del mediodía para evitar quemaduras. En cultivo en zonas muy sombrías puede provocar el cese total del crecimiento y no producirá flores.
Temperatura:
Crece mucho más rápido si las temperaturas se mantienen en un rango de 16ºC-28ºC. Tolera temperaturas superiores a los 30ºC, pero no inferiores a los 0ºC durante largos períodos. En climas templados es importante ubicar a esta planta en un invernadero durante la época invernal.
Sustrato:
Lo más importante del sustrato a utilizar es que permita un rápido drenaje del agua de riego. Se pueden emplear sustratos comerciales para plantas crasas con un agrego extra de arena o gravilla que facilite aún más el drenaje. Nunca utilizar sustratos arcillosos que tienden a compactarse con facilidad.
Frecuencia de riego:
Esta planta requiere de muy poca agua para crecer sana y fuerte. Solo aplicar el riego si los tallos se observan algo arrugados o suaves bajo presión. El riego siempre a la altura del sustrato evitando mojar los tallos para reducir la aparición de hongos.
Plagas y enfermedades:
Afectada regularmente por cochinillas que invaden todas las regiones de la planta. Estas plagas permiten además de proliferación de hongos patógenos sobre sus tallos. También puede ser atacada por ácaros, áfidos y moluscos.
Multiplicación:
Muy sencilla a partir de esquejes de tallos o por semillas. Los esquejes deben ser plantados luego de una semana de su extracción para que las heridas del corte cicatricen.
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